De repenté me encontré con imágenes que creí perdidas de por vida
ya las obtuve, algunas encontré, quisiera seguir con mis hallazgos
ellos siguen en lo mismo y mejor, yo no, voy buscando, voy perdiendo energías
seguiré por interminables senderos de aburrimiento, con el lastre a cuestas
el dolor me persigue, lo cargo a diario y no sé qué debo resolver
mendigos cuestionamientos del día a día, entre la desidia y el anhelo pendiente
me revuelvo de entre mis restos hechos figura, porte y señorío cursilíneo
aporte de mis ancestros van, restas sumarias de mis otras huellas también
ellos me ven, ellos me leen, y no dicen nada; me creo lo que no soy
navego ensimismado por pasiones malhabidas y desencuentros cotidianos
aún no pasa nada y la magia de lo prometido es deuda
tal vez es un bolero puesto en escena ardiente de tu pelo fugaz y sin compromiso
vuelo etéreo, sin valor, desposeído, errante, vagabundo, inconexo
las llamadas entre citas desmembradas pululan sin razón entre calles inciertas
las noches ausentes de alcohol retro surgen como collages imprudentes
de películas limeñas censuradas por lenguas afiladas
nada tengo y nada soy, a son de vals desahuciado
preparo mi última gárgara aciaga
escapo otra vez detrás de aquella sirena siniestra y mortal
arranco mis pétalos muertos de soledad partida
avanzo y retrocedo, me retracto y maldigo
que lo único que veo es un par de ojos escondidos
por el duro trajinar de tu silencio duro y puntual.
música: Tom Waits / créditos: el yuyo, aparichenti, la musa y el vagabundo
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