Storyboard (¡ay miércoles!)...

Claroscuro (6:00 a.m.) el día terciando la semana verano que no asume el sol que se pintó tricolor antes que corneta tricicleando la vida sirva el pan de su frente, sin luces ni sun. Contra la ventana me despierta vaga y extraviada –cuculí le llamó, cuculí le llamó, cucú, cucú, cucú, cucurrucucú-; periódico al estilo yanqui, sus titulares se estrellan todas las mañanas contra el piso adornando miserias diurnas que empapelan de entrada la segunda cuadra del maestro Barbieri (el decano cumple su rol de envolver naturaleza muerta perfecta entrega miserable país). Rutin time every day antes del desayuno blues, facebookeando los días, el Yaris del patriarca arranca la mañana de su tándem solitario y puntual –mi vieja duerme su existencia como ranchera de Pedro Infante (cien años no pienso en ti)-, el jugo esperará la vuelta muy fresco y quieto dentro de su cámara tarea para la casa desde hace cuánto. Perfume de la esfinge castilleja siempre me recuerda que debo alabarte en silencio a sabiendas que mis devaneos suspiran de oasis platónico por la gracia de tu presencia inquieto poema, alucinado romance en outside (es la salida a la calle jungla capital). La radio dos mil –modelo anticucho me sirve para mis fines suficiente hablo-: De Niro en La Molina, el reencarnado ‘joven’ shaolín para después será la promesa que acompaña al corazón. La veredas hierven de estación, caminata en siete trepordeporte mediano dinosaurio enlatado hasta las avenidas en cruz, los seres anónimos dibujan extrañas revoluciones por minuto como si fuera “ esta será tal vez mi última canción que yo canto para ti” del long play de la Lucha en su lucha; mientras colorean el collage de las mañanitas que no cantaba Viko el rey transpirando el paisaje urbano muy cerca al inmenso elefante burocrático ministerio, igual museo mausoleo, antes José Olaya pescaba todas las mañanas su angustia de héroe superlativizado por venciendos caricaturizando las clases primariosas para no olvidar, militares del quinquenio por más cuartos saqueados hasta el rescate de atahualpas etnocidiados. (Control g), al banco –no precisamente para asaltar una ventanilla-, el giro llegó y con él mi recuerdo eterno al hermano arteculturoso –Richy corazón de león-, exit sorteando la estación del tren y cientos de zombies capitalinos hasta la Canadá, el hedor nos consume en una china hasta el barrio jardín (cúster despreciable de cada día te maldigo). La casa de la Almudena siempre me trae recuerdos -black and white- por encontrarme una vez más con cómics chiquititos; mi tierno gusano es la razón de toda esta serial imposible de aprender, su mirada es larga como ella misma, la melancolía es un rocklento por dentro –que acompañan sus momentos grises que son casi siempre todos sus momentos- no hay heat of the moment. Los viles comprobantes de pago –si fueran a la pachamama-, su madre que fue era de ayer, ahora juega su última apuesta en vida de otra vida que anuncian historias para coleccionar. Otro banco que asaltar con su pulcra fachada de agencia del usufructuo a nombre del poderoso mafioso de la rinconada que se carga al país con el sudor de su frente en cuentas del gran caimán o en la suiza cómplice y anónima –‘business son business’-. El colegio es la nueva parada –sin arca comunal ni casualidad, no recibiré nada aunque pase por ‘Go’-, la sala de espera adentro es una condena de a poquitos, el tiempo pasa atropellando los pensamientos de cada uno (las monjas son así). After hour al second floor con la directora de los pingüinos hispana congregación para la cafeteada –repeat, repeat after me: “que no vuelva a pasar”-, ya está, ya fue, ya la tragué. Break pasaje salamanquino saving exchange, otra vez float on, graciela no es su nombre pero suena a sacada de sombrero sin conejo blanco muy cerca de aplacar taquicardias contenidas. Regreso hacia el laburo, el mediodía acosa el sobretiempo estimado, la bitácora in return, ya no sé cuántos sudores en nombre de quién y para quién, en nombre de porqués. La rutina no cuenta para la cuenta, the dark side of mi mueloon lista para la autopsia, Meloxical receta telephone line Liliene a sobrevivencia yuxtapuesta que será de ti. Mañana ella cerrará el capítulo replay que servirá para remendar su pequeña vida –aún sus catorce lunas siguen siendo castas e irresponsables, cómo nos parecemos-; gusano tierno es la factura por pagar por las cuentas del alma (cachetes mayores todavía es boleta). Minúsculas gotas de lluvia veraniega anuncian tímidamente el fulgor de tu despedida al pasar (la partida del márket mientras tu venías, yo iba, siempre me iba, siempre me voy escapando de tu esquiva presencia, como eterno renglón torcido y trémulo que no sabe de quereres, ahora enclaustrados sin aviso y sin remedio). “ La consulta y las miradas son gratis “ –se lo copio al estoico vendedor NN de productos bionaturales montado en aquel dragón urbano vía la vida no es bella, es vida que no convida, pero aún con vida…

I'm going home...

Los días pintaban de reclamo, de desasosiego apuntando a mi cabeza, de la espesa bruma la llamarada de la amistad plena y sin concesiones tocó a mi puerta una vez más y sigo flotando en este mar claroscuro a la espera de varar en la playa que asiente todos mis anhelos contenidos, la resurrección del domingo empieza a asolear mi alma inquieta y vigorosa, se viene el día, está cerca; la fina arena invade mis pies como perfecto trasuntar -close up-; voy camino a casa..

Disperso de domingo

Y así anduve y anduve entre claroscuras horas lateando mis angustias perdidas en la noche extrema sensasión térmica vorágine ciudad (reality float on). El maestro del taller con nombre de guerra suspendido por viles sentencias que la ominosa -no es ciega, es cruel- poquito para su bitácora al oeste país que sonará a carnaval intro resplandeciendo la otra orilla que un día abracé los años postergados en la mirada dulce, dura, tierna y puntual del chino que se fue pero que trajo melodías contenidas para el álbum de mi memoria imposible. La tierra de los buenos aires inquietos por llamaradas de la madre reclama saqueo del homo depredador no sabe que es suya, ahora la pequeña Alicia enmaravillada por su duplicidad fabulesca anuncia siempre sus historias en funciones estelares en el kiosko de las avenidas virtuales cada vez que abro el telón. Agazapada pero no fugitiva su nombre trae fresca canción a mi alma cansada de esperar, ya sé de memorias gratas desde columpios primariosos -la noche que murió Chicago-, paseando por los patios recreativos de las travesuras desbocadas hasta después de clases (siempre olvidé mis chompas colgadas en aquel solitario árbol cuando mi tiempo era rocanrol en el Tomasal de regreso en dos dragones urbanos que mi madre apuraba). Niña mía de vértigo barrio jardín extraviada de pasión en su melódica extrema silenciosa dirección -contra el tráfico que no te parezcas tanto a mí-; tu momento aún no grita porvenir, por venir. Tú sonríes, yo escaneo tus floridas imágenes que saben más de remedios contras las penas, me alegra que tu sol no se apague, tres yuquitas ensalsadas para la partida útimo día que celebrarán con otros cuentos al revés. En el tintero están las próximas respuestas que por mis altoparlantes procesionales sacudirán la próxima semana en vano o quizás un blues del recuerdo fiel y sincero me aguardará sentado todas las noches en el mismo paradero de mis anhelos cómplices como la luna espera al mar...

Mutan Monday

Mutantes sudoríparos deambulan esta ciudad que se calienta de angustia omnipresente / la grasa destila en cada paso que se haga laburo o hueveo sentencia por la sobrevivencia / suena el tema destemplado en cada mirada larga condenan las veredas de tu desamor quebranto suspendido por la gracia esquiva que me invita a contemplarte en silencio trémulo y obsesivo / ya no estás pero mejor que ayer volverás sin menciones honrosas cada parpadeo en nombre del placer circunciso / de caleta te niego y te repudio por la necesidad única de tragar migajas promesas siempre en el vinilo rayado la rockola de a sol sabe a recuerdos arrinconados de perfumados aserrines en el bar de la postergación que vomita barrunto malhabido / mi lateo no es contigo, combino en unipersonal tomando fotos de calles solitarias que se tragan los distritos amarrados en viajes insomnes por la palabra precisa ausente señala punzante y vigilante el tiempo no es conmigo / pie derecho para la llegada del final acapitulado entre sombrías figuras añoro / no guardes esa flor que marchitará de olvido el lunes abatido..

In the name not love

Día 'D'; temprano desayunando inefables noticias que cayeron de golpe anunciando cíclicas sobrevivencias ajustando la vida y la de mi pequeña ella que no sabe de soles multicolores; sólo neblinas en su canción estigmatizando su álbum impublicable / lateo y lateo deporte every day / si las suelas estoicas saben de infinitas cuadras zurcando distritos cómplices de sudores extraños en la estación arrinconando la mutación urbana de rayos UV que barnizan las limeñas pieles para una condena posterior (toneladas bloqueadoras para rostros arios -con su plata- en teleseries chichas de jora país no mejora, no me jodas) / chamba, sudor y sangre -por dentro el corazón reclama unipersonal- / sábado más, sábado menos (San Valentín defeca dinero en nombre del amor) / eso fui en la retrocarga de los sentimientos extraviados / la noche cumple ya con su negro sofocón / el bochorno para tragarlo antes, durante y después de la existencia sale como pan caliente / un día más para la largada que respira taquicardias contenidas por el salario (on-off) / carnavalesco no es / sólo sueño de una noche de verano sorbiendo la última cremolada inquieta salvará este blues mirando la catorceava luna aunque crea ni crea (la sirena de emergencia es cortina musical que destroza sin escape la verdadera belleza del gran silencio)...

Cinema Verite

De tus anteojos respira la mujer que siempre quiero ver / perfecta excusa de imaginarte por la calle del barrio atranquilado / pegando odiosas brechas inefable marca registrada que el tiempo no supo corresponder / ayer hace un tanto que reíamos como pirañas domesticadas -no sé tanto- / la verdad vive agazapada todos estos años que enmohecida el alma inquieta sobrevive silbando bajito / remediando las variopintas seriales antes y después de abrigar la alegría que se retuerce a mi lado en el cuarto callado / una y otra vez veo a los que quiero ver en la sobremarcha de la suprema sin pensarlo siquiera ser protagonista de noches cumbres abrazo-escapo por siempre sin luces ni sol / pasada la medianera estancia terrestre entre voces gráciles y sabias que desde el sesenta y tres aguardan estrenos claroscuros / recojo entonces la gracia de sus mejores años en el álbum intitulable sin menciones honrosas ni palmarés / sólo nuestra verdad sobrevivirá -más allá de lo evidente- mientras los ojos sean nuestros y las miradas disparos francos que asesinen de pureza a este loco corazón.

Resolana

Dibujaba desde la primaria -yo y mis caricaturas, la niñita del Ocharán con su dulce mirada y sus muñequitas de papel para vestirlas mejor se quedó hoy antes de latear por caminos diferentes-; en secundaria los profes y mis compañeros de aula eran las víctimas predilectas de mi arma del humor; me perdí algunos años para volver al dibujo, la gráfica y la plástica en los años vertiginosos; me fui otra vez para escribir más que ayer (¡ay de los tiempos rigurosos!); hace poco tropecé buenamente con mi alma ancestral leída en la voz escrita con apellido común que me sabe a paradero sin finales de espera; en la edad media los sueños por perseguir comienzan a definirse como la balada que un día pinté y me supo a resolana contenida; dije que un día iba a volver, estoy volviendo, ya casi..

chingana sin close up

Sin despedida posible (ruin fue) / la fecha anunciada apunta demasiado cerca -oh vil noche- / los seres de la cotidianeidad no existen -por ahora- / como disparo que clama el viento embiste la vida asumiendo la ominosa estación más allá de los treinta y uno / las veredas se las traga como impronunciables estrofas de poemas compuestos con los ojos / la cortina musical -siempre en su mente- acompaña sus pasos perdidos entreverado por personajes anónimos que apura el sabático escapista día en cualquier día no importa la memoria esquiva que imagina tu nombre listo para atropellar los vacíos propios del diario frenesí / sigue pagando sus cuotas condenatorias con la grasa del capital sumatoria de años desbocados, irreversibles / claroscuras veredas de parques adornados de excretas urbanas sin correas ni dueños / mejor correr que esperar para terminar después en viaje enlatado abusivo sistema zombeando conciencias, vegetando existencias / no en la ciudad de los geranios y las rosas saqueadas de antaño vals criollo y acalambrado / las mandrágoras me saben mejor la fabulesca ironía cuentacuento -inbox- / puerto apaleado, madrigal escuchando a la oscuridad desde mis latidos infecundos / alarido blusero, regalo de Otis para terminar mejor que ayer / el estómago ajustado a las inclemencias de la sobrevivencia en el barrio afichado, en la huída sin destino, sin control, sin remuerdos, con pasión, compasión / chingana sin close up...