jueves, 31 de enero de 2013

confesiones de verano para ti

Los días veraniegos asesinan de sudor y agobio sediento a ciudad gótica, capital gris, metrópoli ensimismada de caos cotidiano y (des)orden de una modernidad que quiere ser lo que tal vez podría imaginarse, pero en una realidad que hierve como olla de presión social seguimos como país mutante emergente en vías, siempre en vías que desvían el norte para volverse sur; así paso los calendarios del nuevo año con la media centuria encima, con mis sueños contenidos, quemándome para la grasa de las capitales; la culminación de la jornada laburo con chaus de personajes convivientes de un story board distinto y parecido -day by day- las calles dibujaron paisajes de películas insospechadas; la noche es fresca para la juerga de muchachos inquietos que quieren sorbérsela de un solo trago; ese cuadrúpedo negro tirado -esperando al siniestro barquero llevárselo- a un lado del pasaje caminata no es más que la despedida de una vida de perros sin justicia, con olvido; la llamada a la hermandad de los años álbum, es un premio delivery, sin palmares pero con cariño premium; imposible acudir al llamado de lo que está fuera de la justa medida (su alegría no es mi alegría); la vida no siempre reparte en cantidades iguales, aprieta; luego existes...

domingo, 27 de enero de 2013

Crónica de un verano cualquiera

Ni el cambio de juego de los pretendientes sub20 podrá cambiar la historia de una eliminación anunciada -el circo del sol necesita malabaristas- nosotros jugadores. Ya se fue la tarde de cremoladas ausentes -once upon a time-, de raspadillas nostálgicas, de marcianos en bolsitas congeladas sin platillos voladores. Así pues llegó con puntualidad germana -bella laciada desde su ventana sin Julieta con estrellita del sur- (desde la calle de Pedro con apellido de alcurnia observo sin ser Montesco), me cansé de fumar los últimos cigarrillos de la impaciencia. El dindoneo de las campanas llamando a la misa de las siete y media irrumpe un tanto el silencio cúspide acompañado de ese rancio trinar del pajarito en off encaletado en su rama dominical. Treinta años -casi- de brecha barrial ahora concluídos en arequipeño almuerzo; -ella es la lora, yo el aprendiz de locutorio-; the final countdown + inesperados obsequios del primer mundo para el clan de tres, (no sabía,acuso sobrecogimiento,las palabras se caen de la mesa para enrollarse como aquel cochinito de la humedad debajo de la última piedra tras el regadío intempestuoso en el gran jardín de este domingo Tello). Lateo linceño, remedios para puntos bonus y mitigar los ajustes de la vida (una zarta de cohetones callejeros se suman en contra de la voluntad de estas palabras -in the keyboards-). Combi cansina en la gran avenida sin el acostumbrado trato despiadado ni carreras Dakar mortales por tregua dominical de calles desiertas; Jockey para dos, -she´s gone-; cúster javicha hasta el banco: -"chau escribe, chau responde". Reparados mis ojos artificiales para las incursiones nocturnas dejo atrás el gigante shoppinero para cruzar el puente del adiós pluscuamimperfecto con sabor a historia pendiente, de palabras que no saben, del secreto de sus lindos ojos sin copyright, de conversa inconclusa, de realitys esquivos,de tiempo cruel por tour imposible de seguir. -'China' hasta el Kentucky (¡qué rápido se conoce el mundo con una moneda!); apuro mis trajinados pasos para abrazar a mis dos tiernas, dejo los regalos encargados en sus inocentes manos; (la mayor se va a terminar su domingo intempestuoso); con la última será atravesando el arco salamanquino. Colas -iceberg- al paso para dos sedientos urbanos, películas del corsario casero ultimitas,el plátano helado prometido para mi tierno gusano con destino retirada hacia el próximo estreno. Suena el último disco de la rockola adiós -con pena desglorificada-, las dos combis muerte no lo serán hoy, suena el pitazo final confirmando la eliminación de esos pueriles muchachos soñando con esa papa más al caldo que nunca tomaron...

lunes, 21 de enero de 2013

El Tata

Mirándome a mí mismo como en el espejo ausente de años intrépidos y felices vago con esta vieja canción -en mi mente- para sostenerme de pronto y en nada la ópera clásica pero reinventada, única para corazones melómanos de película soy un polizonte, un ocupante temporal, un pasajero del tiempo sin espacio prosigo con la herencia de mi Tata contando sus estoicos pasos desde el barrio jardín charlando con quién se le cruce en el camino no importa sin distingos, sin clasismos, sin colores, sin edad, sin credo, ni condición social así era el patriarca -antimaoísta- vivía de acuerdo a su corazón de origen campesino que respondía a una sensibilidad social -casi socialista- en su contradicción doctrinaria, así lo recuerdo hasta sus cien años históricos que la casualidad de esta noche 'remembérica' resultaron en este tributo insospechado ya estaba imaginando volar hacia otra parte los juegos de la mente son caprichosos, así me despido con su mirada tierna y sabia con sus arrugadas manos que escribieron hasta el final de sus días desde aquel longevo velador en su cuarto subte, mirando hacia el jardín interior de nuestra entrañable casa, pasamos ocasionalmente con mi tierno gusano para ver desde afuera, desde el parque (de la mamá Pinta) una vez más ese clásico mural en la sala de estar -de los cuatro grandes- pintado por mi hermano Kique como hermoso legado imperecedero solo la última voz del Tata: " A comer " (sicfan)...

sábado, 19 de enero de 2013

verano sin embargo

De silencio y calor desbordante el verano asume su rol más agobiante los días se han traducido en años que trato de entender porqué llegué al paradero 50 seis años también comencé otra historia unipersonal que asumí contramarea 'deberíamos estar mejor' -sentencia el patriarca nunca conforme- (me) suena a estribillo paporretero en terca e incomprensiva reflexión infinita las calles son ahora distintas en sus nueve como jugando hasta que un día expire éste será mejor, éste es nuestro, una ilusión en Blue Ray pinta mi paisaje agreste yo comediante, yo mutante, yo mimetizante urbano, yo enervante en mi blues por día lavaré mil veces mi cara cubierta de sudor laburo, siempre luciré setentero en mi estampa desde el setenta y dos desde el colegio libérrimo sin Melody con imágenes imposibles de olvido me creo la caja negra que algún día en cualquier parte narrará lo que ha de ser cremoladas psicodélicas no saciarán la sed que siempre seguirá persiguiéndome los adoquines rememorados en cerveza para palomillas colegiales nuevaoleros esas pelotas contenidas en mágicos helados los trajo un viejo cuento en helicóptero chups cielo, patito cantonés, muerte atardecer, corazón asesino y neutral sentimiento Óscares a la infancia cúspide de veranos hojeados con palmares directos y sin escalas mañana es igual que hoy, ayer una película repetida, otra vez sin guión ni brújula hacia la playa ausente de mis malecones encallados por una promesa pendiente...

martes, 15 de enero de 2013

wild is the wind

abrazando la noche como si fuese la última, con la incondicional compañía de Sole -la que está o está- van estos sinsabores de pulsos perdidos en letras vanas con destinatarios negados, voy tragándome mis pasos perdidos como un ciego en la larga avenida de mis años inconclusos, no expiro pero respiro, así es que asumo mi bitácora abortada (de tumbo en tumbo), cortometrajes de vida más allá del álbum con recuerdo y sin nombre; esperando en el paradero unipersonal la llegada de la viajera del viejo mundo, un día cualquiera -si es que su memoria quiere-; oh la noche y mi viejo teclado escribano de verbo sin rastro, de días acechantes como la espuma de la vieja botella lista para morir de un solo sorbo; salud...

domingo, 13 de enero de 2013

el puzzle de Sole...

comiéndome las calles de este domingo agobiante y conmovedor; me fui con ellas al rescate de un cebiche que calme este espejismo cotidiano e inmediatista, lateo de tres por tres, una vez más al cubículo refugio por una cabalgata cinemaníaca que no es más que la pieza que faltaba al puzzle de Sole...

miércoles, 9 de enero de 2013

Julio en enero

La noche golpea más fuerte mis sentidos tras la noticia aciaga desde el viejo mundo, así viajo una vez más por el tiempo in retro, los lamentos quedarán en el tintero del abrazo postergado por la distancia cruel, porque no se puede volver atrás con una varita mágica para resolverlo todo; así con el escalofrío contenido de mi amigo contemporáneo en el colegio aquel con nombre de árboles frondosos y verdes como era/como es mi barrio ceja sierra, trago mi saliva más pesada y me acomodo los lentes para ver mejor la realidad que nos es esquiva y nos lastima; me quedo con tu imagen de niño en primaria, con tu sonrisa pendenciera, con tu lenguaje pueril y fantástico, con el aroma de los jazmines chaclacaínos que hoy quisiera recorrer para vernos como aquellos días en los salones nuestros, en la amistad plena y sana que la edad de la inocencia no miente jamás; Julio Reátegui -in Boston- yo te recuerdo como si fuese ayer..

sábado, 5 de enero de 2013

joroba sin sobar

Alma de noche que no viaja subyugada por el paisaje urbano de ida y vuelta


abrazar al boletero de la Calle Uno no fue posible en su día onomástico -será cuando se podrá-


ayer se fue, premiado de saludos por todas latitudes -unos no leen, no escuchan, no hablan-


aún creyendo que la vida no me ha alcanzado por pueriles perfiles progresivos (no me exalto como antaño)


celebration for fifften years old será/es una pendiente irresoluta, solo sé que no se puede


ellas esperan hacer algo, en el resurrection sunday una 'chiquita' por nuestra familia pequeña cumplo


otra semana volteada para el calendario amenazante que corre como ánima endemoniada


una vez más vagaré sin tu presencia lejana que es una realidad que golpea mis años inconclusos


ni telephone exchange, el buzón vacío, el mensaje de la botella jamás varó en la playa recuerdo imposible


los buenos muchachos han partido, ahora son otros con rostros boceteados que animan mi camino a medias


apagada la radio del convocador de mi historia cómplice el aborto reuna se cae de maduro


yo no lo haría de esa manera, pero hay estilos y fugas calladas que inimagino regalárselas a otros


encuentros imposibles, conversas postergadas una y otra vez, como quisiera ser el genio de la lámpara


chau de olvido inquieto, contemplo y atesoro las escasas y valiosas llamadas con sabores sinceros


'I like it'se ha vuelto una costumbre y una modita en constante posteo de las redes adictivas


después del 'santoyo' sin velas ni torta me sumerjo al rito nocturno every day


ayuno mi silencio cobarde y escapista para decirte que éste es el último pensamiento que viaje hacia ti


en el distrito regazo de refugio Fray Luis de León Hotel me encaleto por bitácoras insospechadas


que flotan en mi alma cansina cada día en la noche no saldré a la ventana...

martes, 1 de enero de 2013

New year day

Acabose el último día del año (que no se disolvió el mundo, solo más vaticinios inútiles y profecías inverosímiles) de la jornada laboral con puntos a favor -las cifras rojas las dejamos para la enmienda-; tras la despedida tradicional augurando sentimientos favorables y buenos deseos recíprocos con los mutantes de la Ramón Castilla (no muy afecto a estilos recogidos -all of the time- concesiones conmigo mismo); voy dejando mis pasos cansinos por las cuadras semioscuras de mi nuevo barrio chamberil como las últimas páginas de vanos poemas alargados arrojados dentro de las mismas botellas que alucino en mi mar inmemorial.

La veredas de la avenida avionera -junto al óvalo higuereteño- han sido tomadas por vendedores ambulantes sacados de una realidad irremediable que no es más que la angustia de la vorágine contenida de ciudad gótica calcutizante que espero no reviente surrealistamente más allá de toda imaginación novelística y apocalíptica.

Guarida y baño, vestuario para la salida a la invitación ofrecida por mi entrañable amigo de/sde érase una vez el otoño del setenta y cuatro en la calle Tomasal cuando dos púberes inquietos querían tragarse la vida a bocanadas; han pasado cincuenta años de mi película de vida y seguimos siéndolo contra toda desaveniencia que sucede -porque nada es fácil, nada es perfecto- en este camino pedregoso lo que la hace más estoica y memorable esta amistad que abraza nuestros años recogidos con historias cómplices (solo falta mi compadre que está lejos pero no del recuerdo insoslayable traído en las conversas a veces abstemias, casi siempre bohemias).

Los sms de mi hija mayor contando de su viaje en la ciudad blanca, de su regalo prometido, de su alegría confundida con la felicidad que añora -junto a su medio corazón que la ha cautivado como Robin a su lady Marian-.

Interwiew obligado para volver a nuestro escenario a diez cuadras de mi jato en el barrio clasemediero, con el aderezo musical que siempre nos gusta, con la parrilla del Birri (anfitrión de esta noche de última), sus kamubis cuñados, su exótica dama de las dunas y los dátiles ancestrales, sus pequeñas ninfas peruanopalestinas -más ricas que cientos de shawarmas-, su hermano de la calle Contumazá cruzando mi ex barrio jardín; también un personaje de nuestras vivencias comunes y prohibidas; todos juntos alrededor del calor de una parrilla amical, con bebidas espirituosas para sazonar nuestros sentidos, para no cabecear -como casi siempre suelo hacerlo-, para creer que será mejor como una terca creencia de sueños ambivalentes.

Ya las cuatro a.m.; retirada porque ya nada es como antes, el cuerpo demanda descanso, taxi satelital, 
-gracias comparito por la gentileza y por decir que ésta es mi casa también bienvenido cuando quiera-.

Mi estómago y mi fatiga me han jugado en contra; ya no puedo, he de incubarme para la hibernación justa y necesaria, mañana es hoy y después quién sabe...